Lección 4ª. ¿Cómo se adaptan los medios y recursos a un grado universitario?
LABORATORIOS, TALLERES Y EQUIPAMIENTO.
La
calidad de los recursos materiales (RM) de un PF se refiere al tema
del funcionamiento adecuado de la docencia, investigación y servicios merced a
la disponibilidad y correcto funcionamiento del equipamiento en pulcras
instalaciones e infraestructuras físicas. Bajo esta consideración del criterio
RM, el análisis de su calidad en la visita de un PF se puede hacer anotando y
comprobando la disponibilidad de m2 en los espacios y contrastación de las
características de los mismos en cuanto a iluminación, calefacción,
refrigeración, acústica, etcétera.
La constatación fáctica de los espacios
dedicados a las funciones del PDI y PAS de los RM es sencilla si la pauta
racional evaluativa consiste en la enumeración de los RM y puestos (por
ejemplo, informáticos) en los espacios (por ejemplo, aulas o laboratorios de un
PF).
De otra parte, nos referimos a que los espacios existentes de un PF para llevar
a cabo las actividades docentes, investigadoras y de servicios son adecuados y
satisfactorios. El entramado de RM de un aula es fácil de contar y medir. No
obstante, el balance para un informe evaluativo no debe consistir únicamente en
resaltar la disponibilidad de equipamiento y en subrayar el tamaño espacial. Se
debe mostrar en un informe índices de satisfacción del alumnado con los RM, que
como constructo alude, entre otros aspectos, al ambiente ecológico de un aula o
espacio reservado a la docencia teórica y/o práctica.
NUEVO
PARADIGMA DE LA SOCIEDAD DE LA INFORMACIÓN: LA UNIVERSIDAD VIRTUAL O INVISIBLE.
La universidad como organización de aprendizaje está rompiendo los muros
del aula para establecer comunicación con el alumnado. Un evaluador externo
observa las instalaciones y RM de las aulas contando las NN. TT. y los puntos
de conexión a Internet o las zonas wi-fi. Es menos evidente, no obstante,
captar en una visita que la tecnología de la información por medio de
ordenadores conectados en red promueva una organización universitaria
estandarizada en el tipo de actividades por la interconexión de lugares hasta
conformar un único espacio de práctica socioeducativa (Agre, 2000: 497).
Porque
el campus invisible aúna más a investigadores, docentes y alumnado que el
espacio físico de los centros universitarios, desapercibido para la mayoría de
ellos. Este nuevo eje de un campus invisible aún no ha mallado o anudado
despachos, aulas, salas de estudio, bibliotecas, dependencias administrativas,
etcétera. La fibra óptica, como los servidores y, en general, la arquitectura
de los sistemas informáticos de las universidades es caro, y está todavía en
proceso de construcción.
Las infraestructuras de NN. TT. en las aulas y laboratorios son o deberían
representar nuevos miniespacios para la reflexión, que no se consigue si improntamos
la docencia y la investigación con la huella de la rapidez en la búsqueda y
expedición de la información, y la investigación sin dar tiempo a la precisión,
a la coherencia argumentativa y ética, o a la toma de decisiones encaminadas al
bien común. La evaluación de la infraestructura informática lleva aparejada una
indagación acerca de la alfabetización telemática y las patologías asociadas a
ella del PDI y del alumnado. El viejo discurso de la libertad académica docente
puede estar constreñido por las nuevas configuraciones y sistemas de
comunicación y gestión informativas (Jackson y McDowell, 2000: 636).
La misión de la universidad - orientada hacia la sociedad del conocimiento - cambia sus funciones
capitales de docencia, investigación y servicios, conforme se invierte en
infraestructuras informáticas que amplían su radio de acción a nuevos
beneficiarios institucionales, empresariales, y estudiantes de toda edad que
aspiran a desempeñar un nuevo rol en el aprendizaje, haciendo más atractiva y
competitiva las instituciones de enseñanza superior (Dumort, 2000: 547-548). El
viejo papel del estudiante adquiriendo información textual en las aulas se
desvanece ante la necesidad de un aprendizaje tutorial.
La tutorización de los
estudiantes se impone en la docencia ante cualquier innovación tecnológica, y
en una enseñanza apoyada en las NN. TT. significa dar un paso a la conversación
presencial o a distancia, a un diálogo interactivo personalizado para
secuenciar los pasos frente a un problema presentado en un laboratorio o en un
programa de teleformación. Esa nueva enseñanza es compleja por dos razones: la
ratio profesor/alumno en un aula virtual disminuye, y no se dispone simultáneamente
de un número suficiente de profesores con competencias informáticas (Bork,
2000: 640). La enseñanza con nuevas tecnologías requiere, consecuentemente, un
rediseño de la instrucción.
MEDIOS Y NUEVAS TECNOLOGÍAS PARA DELINEAR LA ENSEÑANZA.
Cuando un evaluador visita el equipamiento de las aulas reservadas a la docencia e investigación de un PF presta atención a contar el número de RM que facilita la comunicación representando ésta de múltiples formas.
Posteriormente, clasifica los RM según sus cualidades para el
apoyo de la comunicación oral (pizarra, retroproyector de transparencias,
proyector de diapositivas, etcétera), el fortalecimiento de ideas docentes por
medio de textos, imágenes y sonido, o una combinación de estos (sistemas
multimedia, o proyectores de videos, etcétera), materiales auxiliares contra
las enfermedades osteomioarticulares y conectivas (reposapiés y atriles) o la
potencia para el establecimiento de una comunicación a distancia (puntos de
conexión a Internet y ordenadores de sobremesa y portátiles).
La clasificación de los RM por ciertos atributos (interactividad, iconicidad, sincronía, a distancia) es otra aproximación evaluativa que combina el número de elementos y algunas propiedades atribuidas a los medios (Bravo, 2004).
No todos los RM se encuentran en las aulas destinadas
a la docencia. Se almacenan ordinariamente los RM en salas o bibliotecas
multimedia, salvo que un salón se convierta en un laboratorio multimedia o de
informática en el que ni suelen existir inventarios y libros de mantenimiento
de RM, ni planes de seguridad laboral y prevención de riesgos laborales por el
transporte y uso de los mismos. Difícil resulta para un evaluador externo
descubrir, asimismo, el estilo instructivo fomentado en los ambientes
donde existen RM y NN. TT.
Se asume para esos ambientes que la docencia
facilita e incrementa la transmisión de hechos para un aprendizaje de
información factual, pero se desconoce la incidencia que los ambientes
tecnológicos basados en la Web propician en la construcción del conocimiento
estudiantil: es decir, cómo los estudiantes solucionan problemas, desarrollan
conceptos, o promueven el pensamiento crítico hasta convertirse en miembros de
una comunidad de aprendices (Woodard, 2003: 186). (Para aumentar su
conocimiento sobre el concepto de comunidad de aprendizaje, vea la versión en
línea del libro de Howard Rheingold's The Virtual Community en
el siguiente URL: http://www.rheingold.com/vc/book).
El campus físico de un centro universitario que alberga un PF debería mostrar al tiempo su campus invisible, ese que promueve comunidad de aprendizaje y construcción de conocimiento en el alumnado, que autores han llamado una Ciberciudad orientada a la creación de amistad y confianza (Carter, 2005: 149), comunidad, en fin, que existe porque los miembros comparten un propósito común que solo se puede conseguir de forma conjunta. (Lea los doce principios de la colaboración en el siguiente URL: http://www.mongoosetech.com/solutions/principles.html).
Las competencias docentes cambian aumentando en número y complejidad cuando las
actividades se realizan en Redes Asíncronas de Aprendizaje (RAA).
Los procesos
de enseñanza-aprendizaje varían ineludiblemente en las RAA por cuanto la
interacción con los estudiantes es a distancia, los diseños digitales de las
actividades están meticulosamente redactados antes de colgar textos, gráficos,
imágenes y sonido en Internet, la participación de los estudiantes en las
discusiones grupales se hace bajo compromisos de sinceridad y responsabilidad
en los foros, la gestión de los incidentes en línea precisa nuevas alternativas
en la solución de problemas, y las interacciones con otros colegas de distintos
grupos de la misma materia exigen estricta coordinación y cooperación,
etcétera.
Los roles cognoscitivo, afectivo y de gestión de los docentes son más
impredecibles cuando se representan en ambientes RAA, por razones de
profundidad: El rol cognoscitivo relacionado con los procesos mentales de aprendizaje,
almacenamiento de información, y pensamiento, cambia a uno más profundo de
complejidad cognoscitiva en los profesores virtuales. El rol afectivo relativo
a su influencia en las relaciones entre estudiantes, y en el ambiente de clase,
exige encontrar nuevas herramientas para expresar su emoción, aunque se ha
hallado una relación más íntima con los estudiantes. El rol directivo referido
a la gestión de una clase y de un curso requiere una atención mayor al detalle,
a la estructura, y al seguimiento adicional del estudiante (Coppola,
Hiltz y Rotter, 2002: 186).
PROCESOS COGNITIVOS Y SOCIALES DE APRENDIZAJE DE ESTUDIANTES
EN SISTEMAS INSTRUCTIVOS EN LA WEB.
La nueva infraestructura Web de un campus tiene como correlato el
incremento potencial del aprendizaje de estudiantes. Este resultado asumido por
los planificadores de la enseñanza en línea es cuestionable cuando se
generaliza a todos los estudiantes, por cuanto los estilos cognoscitivos de
éstos varían entre sí.
El medio Web, como se constató en el apartado anterior,
obliga a revisar las funciones docentes, en particular la referida al diseño
curricular e instructivo, hasta emparejar diseño instructivo de profesor y
estilo cognoscitivo de estudiante esa habilidad del individuo para la
localización espacial u orientación en el espacio - por ejemplo, diseñando
información más genérica para los estudiantes analíticos y holísticos que
perciben las ideas como unidades o todos, y que son incapaces en separar las
ideas en partes discretas -, y muy segmentada para los estudiantes con un
estilo más visual y verbalizador que aprenden las ideas divididas en partes, y
que tienen dificultades para integrar las partes en un todo -.
¿Cómo se debe
presentar la información de las materias de un PF en la red? El estudio
empírico de Graff (2003: 416-417) sugiere: Los individuos que poseen estilos cognoscitivos diferentes aprendieron más
eficazmente cuando se les proporcionó en la red el nivel apropiado de
segmentación de la información.
La consecuencia de
estudios de esta naturaleza revierte en la gestión de la docencia de grupos de
una misma materia: existen autores que sugieren el establecimiento de
prerrequisitos para el acceso a materias y cursos sugeridos en las guías
didácticas de las materias y docentes de PFs, el mantenimiento del principio
curricular de flexibilidad en los materiales del curso para responder a todos
los estilos cognoscitivos y presuntas habilidades estudiantiles, el seguimiento
del mantenimiento del equipamiento y software electrónico del aula por parte de
personal de apoyo del laboratorio, o la asunción de que el profesorado de un PF
está comprometido con la idea de la enseñanza en línea, como recomendaron
Montelpare y Williams (2000: 100) después de haber impartido las materias
de Introduction to Quantitative Methods y de Introduction
to Epidemiology por Internet.
Las contingencias de una nueva
organización de la enseñanza soportada en Internet hoy por hoy son variadas,
por las debilidades arquitectónicas de los sistemas informáticos de algunos
centros universitarios y las restricciones presupuestarias para mantener
servicios de apoyo al profesorado.
De otra parte, los beneficios en el aprendizaje de Internet son dispares. Es
posible que Internet incremente la información de un estudiante, pero ello no
significa que haya aumentado o mejorado su nivel de exigencia intelectual para
cribar la información. Una de las implicaciones prácticas del artículo de Metzger,
Flanagin y Zwarun (2003: 286) es esclarecedor: Muchos estudiantes pueden depender de Internet para proporcionar información
exacta sin tomar los pasos requeridos para asegurar la veracidad de la
información que obtienen.
La veracidad informativa requiere poseer
habilidades de alfabetización documental, entre otras, búsqueda, evaluación y
cita de información, y problemas legales y éticos involucrados en el uso de
información. Porque, en opinión de Wang y Artero (2005: 81), con esas
habilidades de alfabetización informativa se ofrece la mejor
oportunidad para que los estudiantes lleguen a ser aprendices duraderos con
éxito y futuros empleados. Es misión de un evaluador establecer un índice
de alfabetización del personal de un PF en RM.
EVALUACIÓN
EN LÍNEA Y DESARROLLO PROFESIONAL EN NUEVAS TECNOLOGÍAS.
El equipamiento de RM de las aulas de un PF es oferta fosilizada de
docencia, si ésta no acaba dando existencia a las cosas por medio de textos,
imágenes y sonidos. El PDI que imparte docencia y desarrolla investigación en
las aulas con puestos conectados a Internet tiene que mostrar nuevos códigos en
los procesos de enseñanza-aprendizaje. Dos de las nuevas claves son la temática
(evaluación) y la métrica (herramientas en línea). ¿Cómo se hace una evaluación apropiada en línea?, fue la
pregunta que se hicieron los investigadores australianos Voigt
y Swatman (2004: 185) en dos estudios de caso para cada uno de los cuales
arbitraron una aproximación evaluativa diferente, desde la investigación acción
a un modelo sistemático de evaluación.
De otra parte un aprendizaje distribuido, híbrido o mezclado – como si fuera café (en inglés, blended) - es la consecuencia del advenimiento de grades principios de convergencia cultural, como son el aprendizaje recurrente, la globalización o la edad de la información, que mueven las instituciones a una sociedad del conocimiento y a las universidades a crear sistemas o ambientes de aprendizaje virtual (Kirkuk y Kirkwood, 2005). Así, se hallan instituciones de educación a distancia que prestan atención a la conexión, interacción, exploración y descubrimiento en lugar de a la transmisión de información moviendo al profesor a ejercitar un rol más activo (diseño de materiales, asesoramiento y seguimiento, evaluación formativa, etcétera) en el aprendizaje del estudiante. La evaluación de los RM disponibles en un PF es una cuestión inseparable del aprendizaje de los estudiantes y de la alfabetización del personal docente mediante programas formativos específicos.
El estudio de un multimedia de Derecho realizado por McDonald, McPhail, Maguire y Millett (2004: 294) en universidades australianas fue la excusa para hacer un estudio evaluativo de un CD que contenía exposiciones, y bases de datos de resúmenes de casos. En este experimento se diseñó un proceso evaluativo y desarrolló un modelo conceptual para evaluar el impacto de los RM en los cambios de los estudiantes. En otro estudio aplicado en la Facultad de Administración de Empresa de la Universidad de Harvard, Sensiper (2000) relató el proceso de adaptación de los estudios de caso textuales a sistemas multimedia que utilizaron el lenguaje de video, gráficos y películas para crear herramientas docentes significativas (Ídem, 620), o la utilización de videoconferencias para escuelas hospitalarias del área de Birmingham (Hill, Hill y Hampton, 2004).
Un evaluador del uso de NN. TT. en un PF interrogará la aplicación que se hace de las mismas en el desarrollo profesional docente universitario. Cuando la Universidad de Glamorgan apostó por la enseñanza electrónica rápidamente se percataron sus autoridades de la necesidad de preparar a los docentes en NN. TT. Esta conveniencia fue resaltada por Fitzgibbon y Jones (2004), quienes, apoyándose en factores sociales e intelectuales de aprendizaje, perfeccionaron a los docentes haciéndolos partícipes de la idea de comunidad de aprendizaje. Una de las lecciones derivadas de la aplicación de las NN. TT. aprendidas en la experiencia formativa fue particularmente relevante:
Hay también problemas específicos con respecto a la tecnología - se necesita tener una plataforma fiable desde la que se puedan operar los materiales en línea, y cualquier falta de fiabilidad en el sistema necesita ser neutralizado por medio de medidas de seguridad como mantener contactos vía correo electrónico (Ídem, 33).
De otra parte un aprendizaje distribuido, híbrido o mezclado – como si fuera café (en inglés, blended) - es la consecuencia del advenimiento de grades principios de convergencia cultural, como son el aprendizaje recurrente, la globalización o la edad de la información, que mueven las instituciones a una sociedad del conocimiento y a las universidades a crear sistemas o ambientes de aprendizaje virtual (Kirkuk y Kirkwood, 2005). Así, se hallan instituciones de educación a distancia que prestan atención a la conexión, interacción, exploración y descubrimiento en lugar de a la transmisión de información moviendo al profesor a ejercitar un rol más activo (diseño de materiales, asesoramiento y seguimiento, evaluación formativa, etcétera) en el aprendizaje del estudiante. La evaluación de los RM disponibles en un PF es una cuestión inseparable del aprendizaje de los estudiantes y de la alfabetización del personal docente mediante programas formativos específicos.
El estudio de un multimedia de Derecho realizado por McDonald, McPhail, Maguire y Millett (2004: 294) en universidades australianas fue la excusa para hacer un estudio evaluativo de un CD que contenía exposiciones, y bases de datos de resúmenes de casos. En este experimento se diseñó un proceso evaluativo y desarrolló un modelo conceptual para evaluar el impacto de los RM en los cambios de los estudiantes. En otro estudio aplicado en la Facultad de Administración de Empresa de la Universidad de Harvard, Sensiper (2000) relató el proceso de adaptación de los estudios de caso textuales a sistemas multimedia que utilizaron el lenguaje de video, gráficos y películas para crear herramientas docentes significativas (Ídem, 620), o la utilización de videoconferencias para escuelas hospitalarias del área de Birmingham (Hill, Hill y Hampton, 2004).
Un evaluador del uso de NN. TT. en un PF interrogará la aplicación que se hace de las mismas en el desarrollo profesional docente universitario. Cuando la Universidad de Glamorgan apostó por la enseñanza electrónica rápidamente se percataron sus autoridades de la necesidad de preparar a los docentes en NN. TT. Esta conveniencia fue resaltada por Fitzgibbon y Jones (2004), quienes, apoyándose en factores sociales e intelectuales de aprendizaje, perfeccionaron a los docentes haciéndolos partícipes de la idea de comunidad de aprendizaje. Una de las lecciones derivadas de la aplicación de las NN. TT. aprendidas en la experiencia formativa fue particularmente relevante:
Hay también problemas específicos con respecto a la tecnología - se necesita tener una plataforma fiable desde la que se puedan operar los materiales en línea, y cualquier falta de fiabilidad en el sistema necesita ser neutralizado por medio de medidas de seguridad como mantener contactos vía correo electrónico (Ídem, 33).
Referencias
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Society, 3(4), 616-621.
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• Wang, Y-M. y Artero, M. (2005). Caught
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International, 42(1), 71-82.
• Woodard, B. S. (2003). Technology and
the constructivist learning environment: Implications for teaching information
literacy skills. Research Strategies, 19, 181-192.
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